Detalles de la ilustración "Macrocosmos en anafase"
Autor: Arydia Barajas Hernández
Materiales: estilógrafo, pluma, acuarela, lápices de colores.
Técnica: Lápiz sobre papel, acrílico y espirógrafo
Autor: Arydia Barajas Hernández
Materiales: estilógrafo, pluma, acuarela, lápices de colores.
Técnica: Lápiz sobre papel, acrílico y espirógrafo
Bocetos que realicé para planear la composición y elementos de mi ilustración "Macrocosmos en anafase".
Lápiz sobre papel.
Lápiz sobre papel.
Breve ensayo curatorial sobre esta ilustración
“MACROCOSMOS EN ANAFASE”
Un mandala puede ser una imagen sintética que engendra o aumenta fuerza, y que tiende a superar las oposiciones de lo múltiple y lo uno, de lo descompuesto y lo integrado, de lo exterior y lo interior, de lo difuso y lo concentrado. La composición en mi dibujo es un mandala donde hay representada más de una clase de fuerza: una que se genera, otra que hace girar y circular, otra más que atrae y otra más que repele. En todo momento hay una dicotomía, pero siempre unida.
La mujer desnuda y la rueda están contenidas en una célula separándose a la mitad, mas permanecen en unión mediante el cabello de la fémina. Al exterior, hay microorganismos que buscan infectar la célula.
Por otro lado, el mandala posee una doble eficacia: conserva el orden físico si es que ya existe, y lo restablece si ha desaparecido. Así considero que se manifiesta la relación entre el personaje principal (la mujer) y las criaturas a su alrededor: ella en sí se encuentra en desequilibrio, está triste y expuesta en desnudez a entes que la podrían enfermar. Pero ella misma, dentro de su célula es capaz de reencontrar el orden mediante aquello unido a su cabello: una rueda, símbolo del orden representado en perfección circular; el espirógrafo es su protección dentro de la atmósfera celular en anafase, proceso que le llevará a desprenderse del círculo, tarde o temprano. Para entonces habrá retomado su equilibrio del espiral perfecto, lo suficiente para protegerse del inminente caos conformado por animales acuáticos y microorganismos gigantes.
La mujer desnuda y la rueda están contenidas en una célula separándose a la mitad, mas permanecen en unión mediante el cabello de la fémina. Al exterior, hay microorganismos que buscan infectar la célula.
Por otro lado, el mandala posee una doble eficacia: conserva el orden físico si es que ya existe, y lo restablece si ha desaparecido. Así considero que se manifiesta la relación entre el personaje principal (la mujer) y las criaturas a su alrededor: ella en sí se encuentra en desequilibrio, está triste y expuesta en desnudez a entes que la podrían enfermar. Pero ella misma, dentro de su célula es capaz de reencontrar el orden mediante aquello unido a su cabello: una rueda, símbolo del orden representado en perfección circular; el espirógrafo es su protección dentro de la atmósfera celular en anafase, proceso que le llevará a desprenderse del círculo, tarde o temprano. Para entonces habrá retomado su equilibrio del espiral perfecto, lo suficiente para protegerse del inminente caos conformado por animales acuáticos y microorganismos gigantes.